Para Albert Fouquet, creador de Eight & Bob, Cap d’Antiques era el paraíso. En este encantado pueblo de la Riviera francesa, Fouquet pasaba largas vacaciones en la década de los 30 en la compañía de la aristocracia europea. En sus alrededores fue donde años más tarde se dio el encuentro entre John F. Kennedy y el mismo Fouquet, que fue el origen de las fragancias de Eight & Bob.
Cap d’Antiques es un aroma que huele a mar, a costas mediterráneas que huyen del calor, a vacaciones de verano debajo en una sobrilla mientras la brisa marina ondea melenas. Notas verdes de hoja de violeta y menta, acompañadas de maderas como el abedul y el cedro, dan lugar a un acorde con una elegancia innata.